Por Rogério Tomaz Jr.¹
Más de cuatrocientas ciudades de Brasil y del exterior tuvieron actos contra Jair Bolsonaro este sábado 24 de julio. El número es expresivo, pero lo cierto es que el total de personas que participaron en las manifestaciones bajó significativamente en comparación con las marchas del 19 de junio: 600 mil personas ahora, contra 850 mil el mes anterior.
Varias razones explican esto. Las vacaciones de julio son la principal causa. Pero también hay cierto cansancio ante la resiliencia de un gobierno que cada día tiene en su contra nuevas denuncias, pero parece alejarse cada vez más de la posibilidad de un juicio político.
El último movimiento de Bolsonaro para obstaculizar el camino hacia el “impeachment” fue la nominación del senador Ciro Nogueira, uno de los “dueños” del “Centrão”, como ministro de la Casa Civil, el jefe de gabinete del gobierno.
El presidente brasileño olvidó las duras críticas hechas en 2018 al bloque que abriga varios partidos identificados con la política sin color ideológica, pero con “color de gobierno y puestos de mando” en la Cámara de Diputados y asumió lo que siempre fue: “Soy del Centrão. Allí nací”, dijo Bolsonaro en una entrevista radial el jueves (22).
Nogueira es presidente del Progressistas, ex PP [Partido Progresista], partido donde estuvo Jair Bolsonaro durante 19 años. En 2017, el nuevo ministro llamó de “fascista” a Bolsonaro, entonces precandidato a la presidencia, y se refirió a Lula como el mejor gobernante de la historia de Brasil. El video con estas declaraciones de Nogueira volvió a circular la semana pasada, así como el de Eduardo Bolsonaro atacando al Centrão.
El caso es que, aunque debilita aún más la imagen de Bolsonaro en la opinión pública, la llegada de Ciro Nogueira al gobierno hace más remota la posibilidad de interrupción del mandato del ex capitán del ejército.
Por otro lado…
La búsqueda desesperada de la derecha por una “tercera vía” es tan evidente y bochornosa que podría terminar contribuyendo a consolidar el electorado de Lula. El escenario de la victoria en la primera vuelta es una realidad: el gobierno de Bolsonaro de rodillas y la derecha neoliberal pidiendo votos a sectores que ya no se dejan seducir por el discurso de “outsider” que favoreció la victoria del candidato de ultraderecha en 2018.
PD: Ciro Nogueira representa al estado de Piauí, en la región Nordeste, y fue diputado federal entre 1995 y 2010, cuando fue electo senador. En 2018 fue reelegido. Con la licencia del cargo en el Senado, quien asume la vacante es exactamente su madre, quien es la primera suplente en el mandato. De esa manera, uno puede tener una noción de la visión política que tiene el nuevo ministro de Bolsonaro.
¹ Periodista brasileño, residente en Argentina, cursando la Maestría en Estudios Latinoamericanos en la Universidad Nacional de Cuyo, en Mendoza. Trabajó durante 11 años en la Cámara de Diputados de Brasil.