Hacia un punto de inflexión en el conflicto de Ucrania y una reconfiguración de la dinámica geopolítica

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Por Federico Montero y Pablo Macia

El pasado jueves 3 de Marzo, en la segunda ronda de conversaciones, Ucrania y Rusia acordaron el establecimiento de corredores humanitarios para la evacuación y la entrega de alimentos y medicinas, en el marco del conflicto bélico que comenzó el 24 de febrero, con la operación militar rusa en territorios ucranianos bajo la exigencia de “desmilitarizar y desnazificar” la región como salvaguardia de su seguridad. Durante las conversaciones se discutieron tres aspectos: el militar, el humanitario internacional y una futura solución política del conflicto. En ese marco prevén un posible alto el fuego para las provisiones y una nueva ronda de negociaciones. Sin embargo, la Federación Rusa muestra una clara determinación de cumplir con los objetivos de desmilitarización y el estatus de neutralidad de Ucrania para solucionar un conflicto irresoluble desde el 2014, así se lo hizo saber Putin a Macron, quien cree que ‘lo peor está por venir’ en Ucrania. A poco más de una semana de conflicto, el Alto Comisionado de la ONU para los Refugiados confirmó que un millón de personas ya abandonó Ucrania, lo que representa más del 2% de la población de 44 millones de personas. Además, la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet confirmó 802 bajas civiles con 229 muertos como impacto de la ofensiva rusa en Ucrania y pidió el cese inmediato de los ataques en zonas urbanas, reporta daños considerables en objetivos civiles, tales como hospitales, escuelas y guarderías.

Las tropas rusas sumaron triunfos militares aterrizando en Jarkov, segunda ciudad ucraniana en cantidad de habitantes y con la toma de Jerson, ciudad portuaria a orillas del mar Negro que está a poco más de 100 kilómetros al noroeste de la península de Crimea. Otro frente de avance de las fuerzas rusas se dirige hacia la capital ucraniana, donde las tropas  ‘se concentran cada vez más cerca’ de Kiev, según el Intendente de la ciudad. Además, el viernes el ejército ruso tomó la central nuclear de Zaporiyia, la más grande de Europa, en un ataque con artillería que provocó un incendio en las instalaciones pero que fue extinguido. Según la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) los niveles de radiación permanecen estables en la planta nuclear, lo que representa un alivio ya que según la compañía Energoatom, una catástrofe nuclear en Zaporiyia sería “seis veces peor” que la de Chernóbil.

Frente a la superioridad militar Rusa con respecto a Ucrania, la Asamblea General de la ONU resolvió ‘exigir’ a Rusia que cese la guerra. La resolución, que no tiene peso sancionatorio pero sí el fuerte simbolismo de provenir del organismo multilateral más amplio, fue aprobada con 141 votos a favor, entre ellos la Argentina, cinco en contra y 35 abstenciones. En cambio sí han sido más efectivas las sanciones propinadas por la Unión Europea, que decidió excluir a Rusia del sistema financiero y bloquear su Banco Central, con lo que más de la mitad de sus reservas se verán afectadas. Además, resolvieron excluir del sistema de transacciones financieras Swift a siete bancos rusos a partir del 12 de marzo. También los siete estados del G7 acordaron nuevas sanciones contra Rusia y aportar ayuda humanitaria a Ucrania.

La decisión rusa de reconocer las regiones separatistas en el este de Ucrania y la posterior invasión de ese país desencadenaron una ‘guerra económica’ sin precedentes contra Rusia, con sanciones internacionales que incluyeron el cierre de los espacios aéreos, congelamiento de activos, bloqueo de medios, exclusión de sistemas financieros y competencias deportivas, entre otros, que buscan hacer colapsar su economía y dejar a Moscú cada vez más aislado. Inclusive, buscan impedir que Rusia burle las sanciones usando criptomonedas, ya que las compras de las mismas en rublos se dispararon y batieron récords. Las sanciones se desarrollan hasta en redes sociales y canales informativos, donde se prohibió la difusión de los medios rusos RT y Sputnik en la UE, o con el etiquetado a periodistas como ”medios afiliados al gobierno de Rusia” en Twitter, medida que fue rectificada por las críticas.

Frente a esta escalada de sanciones inusitada, el presidente Putin respondió con rígidas medidas como la duplicación de la tasa de interés o la prohibición de transferencias de divisas al extranjero por parte de los residentes, además de la obligación para los exportadores de convertir en rublos el 80% de sus ingresos en monedas extranjeras. Por otro lado, Rusia dejará de suministrar motores para cohetes a Estados Unidos y otros insumos estratégicos. De esta forma, las repercusiones de las sanciones sacuden los mercados y genera riesgos económicos en  la Eurozona con efectos en la inflación, especialmente a partir de la industria energética y del alza en los precios de granos donde los precios del trigo aumentaron 37% y los del maíz 21% en lo que va del año. Además Europa necesita reducir su dependencia energética con Rusia y se prepara para una posible interrupción del suministro de gas natural que alcanzó un récord esta semana.

Por su parte, China es un importante comprador de petróleo y gas ruso y es la única potencia que se ha abstenido de criticar el ataque lanzado por Rusia contra Ucrania hace siete días. En ese marco descartó sanciones y restricciones a Rusia y manifestó continuar con “ una normal cooperación comercial basada en el espíritu de respeto recíproco, igualdad y mutua ventaja”. A su vez, China advirtió que  espera no recibir sanciones por seguir comerciando con Rusia.

En Estados Unidos, la vinculación del conflicto con la política doméstica se puso en escena en el discurso sobre el Estado de la Unión que dirigió el Presidente Biden al Congreso. Allí, , Biden afirmó que Putin está ‘más aislado que nunca’ y lo acusó de haber “premeditado la guerra” y “rechazar los esfuerzos diplomáticos”. La apuesta de Biden a cerrar filas en torno del conflicto con Rusia se da en un contexto en el que los índices de confianza en el presidente entre la opinión pública se sitúan en torno al 40% y se pronostica que los republicanos se queden con el control del Congreso en las elecciones de medio mandato de noviembre próximo. Pese a una economía fuerte, la inflación bate récords nunca vistos en cuatro décadas.

Descartada esa opción, el presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, pidió este martes sumar a Ucrania a la Unión Europea, pero el proceso de adhesión al bloque tradicionalmente lleva varios años, en algunos casos casi una década, de negociaciones y reformas internas. De todas formas, la UE invitó a Ucrania a participar en su reunión extraordinaria este viernes y decidió utilizar 450 millones de euros del Fondo Europeo para la Defensa de la Paz para financiar la compra y entrega de armas y equipos letales a las fuerzas ucranianas. En el contexto de la creciente beligerancia, Moldavia al igual que Georgia solicitaron formalmente el ingreso a la Unión Europea. Frente a estos pedidos, terció Turquía, quién pidió a la UE “sensibilidad” similar a la expresada a Ucrania tras décadas de estancamiento en el proceso de acceso del país al bloque europeo.

En un marco de gran incertidumbre, lo único claro es que se están poniendo en juego importantes cambios en los equilibrios de poder, cuyo desenlace está en pleno desarrollo. Como muestra de estas transformaciones, el domingo pasado, Alemania anunció una ‘nueva era’ en su políticas exterior y de defensa, con una inversión de 100.000 millones de euros para sus fuerzas armadas durante 2022. Así, la mayor economía de Europa invertirá más del 2% de su PIB en defensa, superando lo reclamado por la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN).

Otro signo de cambio de época en Europa es el acercamiento de Finlandia y Suecia a la OTAN que no se unieron a esa coalición ni durante la Guerra Fría, ni en las décadas subsiguientes.

Por otro lado, en el referéndum constitucional en Bielorrusia celebrado el fin de semana pasado arrojó el aval de la mayor parte de la población a las reformas impulsadas por el presidente, Alexander Lukashenko, no sin disturbios que dejaron 800 detenidos. .Las reformas que además de poner límite a las reelecciones incluyen las cláusulas sobre la “neutralidad” y el “estatuto nuclear” de Bielorrusia.

Mientras tanto, en Francia, Macron presentó su candidatura para la reelección en las próximas elecciones de abril de 2022 a la vez que los ultraderechistas Marine Le Pen y Éric Zemmour obtuvieron los avales necesarios para oficializar sus candidaturas.

El hecho más relevante de la semana en América Latina lo constituyó laCuarta Cumbre de la Comunidad del Caribe (Caricom)- y del Sistema de la Integración Centroamericana (SICA), en la ciudad beliceña de San Pedro. En la misma, los jefes de Estado y de Gobierno de las regiones del Caribe y Centroamérica buscarán fortalecer la consulta en política exterior, colaborar activamente en asuntos de desarrollo socioeconómico, incluidos el turismo, el comercio y la inversión; y elevar la cooperación en cambio climático y salud pública, entre otros asuntos. En la cumbre, el secretario general de la ONU, António Guterres convocó a más solidaridad en Cumbre Caricom-SICA para actuar para lograr la equidad en el acceso a las vacunas anti-Covid-10, reformar el sistema financiero mundial, tomar medidas climáticas y construir la paz y la seguridad en ambas regiones.

También participó el Presidente argentino Alberto Fernández, en calidad de presidente pro tempore de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños, para abordar asuntos hemisféricos y regionales. En su Discurso detalló que los principales objetivos de la Presidencia Pro Tempore de la Argentina en la CELAC para 2022 son impulsar la recuperación económica inclusiva, desarrollar estrategias sanitarias y de cooperación técnica, hacer frente a los desafíos climáticos y fortalecer la gestión integral del riesgo de desastres.

En México AMLO recibió al ex presidente de Brasil Lula da Silva, quien llegó ayer a México para participar en foros políticos y académicos en el país. En una de sus intervenciones en Lula pidió a Rusia, Ucrania, EEUU, China y UE poner fin a la guerra.

Al respecto de la situación en Ucrania, Cuba, Venezuela, Bolivia y Nicaragua cuestionan el ‘doble rasero’ ante el accionar ruso, rechazando con firmeza y rechaza todas las invasiones y acciones unilaterales realizadas por varias potencias a lo algo de la historia reciente, como en el caso de Afganistán, Irak, Libia, Siria, Palestina y hoy Ucrania.

En Perú, el presidente Pedro Castillo acusó a la fiscalía de “desestabilizar” a su gobierno, luego de que de una empresaria que es investigada por su presunta participación en delitos de corrupción, denunciara que Castillo formaba parte de una supuesta organización criminal enquistada en el gobierno. El objetivo de dicha organización, que estaría infiltrada en diversos ministerios y el Congreso, sería obtener dinero con las licitaciones de obras públicas. Esto sucede en momentos donde el gobierno busca la aprobación del Congreso de su nuevo gabinete y la derecha presiona con movilizaciones en Lima para declarar la “vacancia” e iniciar la destitución de Castillo.

En Bolivia, expertos de la OEA ratificaron que hubo masacres en 2019 en el contexto del golpe de estado que derrocó al presidente Evo Morales y recomendó al Estado boliviano “adoptar un plan de atención y reparación integral a las víctimas”.  Así, el ex presidente Evo Morales denunció al Secretario General de la OEA, Luis Almagro por la complicidad que tuvo en  provocar el golpe de Estado que lo derrocó.

En Brasil el Supremo Tribunal Federal (STF), suspendió la última causa contra Lula dentro del marco de la operación judicial Lava Jato. El país carioca alcanzó a 650 mil muertes por Covid-19 durante esta semana, siendo el segundo país del mundo con mayor número de víctimas mortales por el patógeno, detrás de Estados Unidos, y el tercero en infecciones, tras la nación norteña y la India.

En Uruguay, un informe de la Asociación de Empleados Bancarios de Uruguay (AEBU) dio cuenta del crecimiento récord de los depósitos bancarios a la vez que se profundiza concentración de riqueza en Uruguay. La mitad de ese crecimiento total corresponde a los poseedores de más de un cuarto de millón de dólares y si se agregan los que tienen más de 100 mil dólares, representa un 70 por ciento de los depósitos.

En Argentina, el Gobierno alcanzó a cerrar el texto completo del acuerdo con el FMI para poder refinanciar los 45 mil millones de dólares tomado en préstamo en 2018 por el expresidente Mauricio Macri. El debate parlamentario de la iniciativa comenzará en Diputados el próximo lunes. Ese día concurrirá a exponer ante la Comisión de Presupuesto de esa Cámara el ministro de Economía, Martín Guzmán. La semana había comenzado también con el discurso del presidente Alberto Fernández en la apertura de sesiones del Congreso de la Nación en el que se enfocó en los próximos 2 años de cara a propuestas de crecimiento con justicia social luego de la recuperación de los dos años de pandemia. Así promovió una serie de proyectos del Ejecutivo a debatir en el 140° período de sesiones ordinarias.