La Pandemia y la Argentina: comparación regional y cooperación internacional

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En el estudio “La Argentina ante un mundo en pandemia”,  el Observatorio del Sur Global y la consultora Analogías relevan las opiniones de los habitantes del Área Metropolitana de Buenos Aires con respecto a la pandemia de COVID-19. Las preguntas realizadas sondean sobre la importancia de la pandemia, las medidas tomadas para evitar los contagios y cómo las aplica Argentina, la cooperación internacional y la liberación de la patente de las vacunas.

La importancia de la pandemia

La primer pregunta de la encuesta  tira por tierra el relato que presenta a la pandemia de COVID-19 como una enfermedad más. Un 82% de los encuestados se mostró de acuerdo con que “la pandemia del coronavirus es lo peor que le pasó a la humanidad en las últimas décadas”. En momento en que transitamos la segunda ola, la pandemia se ha vuelto la principal preocupación de los argentinos.

Las medidas y su aplicación

Dos medidas para limitar el contagio del COVID-19 son consideradas en el estudio: las cuarentenas, o restricciones a la circulación, y la limitación a la educación presencial en las escuelas.

La gran mayoría reconoce que las medidas han sido aplicadas en los países que lograron controlar el crecimiento de los casos de coronavirus. El 80,1% de los encuestados sabe que las restricciones a la circulación fueron aplicadas en dichos países y el 82,9% los hace con respecto a la limitación a las clases presenciales en las escuelas.

Más allá del debate planteado por los medios de comunicación sobre la eficacia de estas medidas, y el apoyo de la ciudadanía a su utilización, los encuestados coinciden en que sí son eficaces. El 64,7% de los encuestados cree que las restricciones a la movilidad son eficaces y el 56,6% cree que la limitación de la educación presencial es eficaz.

A pesar de la aplicación de estas medidas, que son consideradas efectivas, está la sensación en gran parte de los encuestados (43,8%) que la Argentina se encuentra en una situación  peor que el resto de la región sudamericana. Esta percepción es contraria a lo que indican los datos epidemiológicos ponderados por población, donde la Argentina tiene una menor cantidad de muertes por millón de habitantes y tasa de mortalidad. La Argentina sí tiene una mayor cantidad de casos por millón de habitantes que el promedio regional. El 23,3% de los encuestados coincide con los datos epidemiológicos y sostiene que la Argentina tienen una mejor situación que la región, en tanto el 26,7% cree que es una situación similar.

Una situación similar se da con el proceso de vacunación, cuestionado continuamente por los medios de comunicación masiva. Si bien la Argentina tiene una tasa de vacunación superior (12,3%) al de la región (9,9%), el 45,4% de los encuestados cree que el proceso de vacunación avanza peor que en la región. El 25,5% cree que está mejor, como lo indica la estadística, y el 21,8% cree que el proceso avanza a la velocidad de la región.

Cooperación internacional

Esta semana la Argentina recibió 2 millones de dosis de vacunas Sinopharm de China y más de 750 mil Sputnik V de Rusia, superando los 11 millones de vacunas recibidas desde el comienzo de la pandemia.

Esta cooperación internacional para la lucha contra la pandemia de COVID-19 es percibida fuertemente por la población del Área Metropolitana. El 42,2% de los encuestados cree que Rusia es el país que más ha colaborado con Argentina, seguido por Estados Unidos (7,6%), China (6,1%) y la Unión Europea (4,8%). 39,3% no supo identificar quién ayudó más.

La diferencia importante hacia el reconocimiento de Rusia como principal colaborador contra la pandemia puede deberse a la presencia mediática de la vacuna Sputnik V. El debate por la eficiencia de la vacuna, corroborada por estudios científicos, ocupó gran parte del verano. Además la gran cantidad de vuelos de Aerolíneas Argentinas a Moscú para buscar las dosis, la mantuvieron en la mira pública. Por otro lado, China colaboró ampliamente mediante la Operación Shangai, que constó de 32 vuelos y 8 buques con equipos de protección personal y respiradores, además de las vacunas Sinopharm. Sin embargo, no parece haber repercutido tanto en el público. Estados Unidos es más reconocido, a pesar de haber hecho donaciones menores, a través del Ministerio de Defensa.

La visibilización de la cooperación internacional con las grandes potencias plantea en la población la necesidad de aumentar la cooperación en la región latinoamericana. El 59,3% de los encuestados cree mucho o bastante que la Argentina debería coordinar más con los otros países latinoamericanos las acciones contra la pandemia. Sólo el 24,1% cree que debería hacerlo poco o nada y el 16,5% no supo contestar.

Ejemplo de esta cooperación latinoamericana fue la producción en conjunto entre Argentina y México de dosis de la vacuna de AstraZeneca. Este acuerdo para la producción de vacunas es ampliamente conocido (65,6%) por la población, y visto positivamente por una proporción mayor (72,2%). Sólo un 21,1% se encuentra poco o nada a favor del acuerdo y el 6,7% no sabe. Las demoras en el envasado en Mexico del principio activo hecho en Argentina, debido a la falta de filtros especiales y otros insumos, impidieron la entrega de esas dosis que pronto llegarán al país.

Liberación de patentes

Acuerdos similares al de Argentina y México podrían realizarse entre más países si la producción de las mismas no estuviera restringidas por los derechos de propiedad intelectual, es decir, las patentes. Al menos esa parece ser la opinión de la amplia mayoría de los encuestados, que en un 79,4% respondieron afirmativamente a la pregunta “¿Cree Ud. que las vacunas se tendrían que producir libres de patentes en el mundo para que lleguen a todos los que las necesitan?” El 11,3% respondió negativamente y el 9,3% no lo hizo.

Esta respuesta fue común a todas las categorías, por sexo, edad o región geográfica. Quienes más están de acuerdo con la liberación de patentes son los que se encuentran en grupo de riesgo por su edad (mayores de 60 años) con un 83,9%.

El estudio realizado deja en claro que una política exterior argentina basada en relaciones múltiples con diferentes potencias mejoran las posibilidades de cooperación en crisis que no puede resolver por ella misma. Las alianzas estratégicas con Rusia y China se han hecho valer al momento de recibir vacunas y nuestra relación natural con la región es estimada por la población como necesaria de ser profundizada.